Hay grandes diferencias entre un sistema de manejo de la custodia de los hijos, ya sea paralela o enfocada en la cooperación.

Es importante que cada uno decida qué es lo mejor para ustedes y el bienestar de sus hijos. Cada divorcio es diferente y cada relación familiar también es distinta.

El bienestar de los hijos es fundamental antes, durante y después del divorcio.

Por ejemplo: ir a dejar a tus hijos o recogerlos, no debería de ser una experiencia traumática para los niños. Si tu ex pareja y vos no pueden verse sin decirse algo y causar una escena, lo mejor es que te quedés en el vehículo y sean tus hijos quienes entren o salgan.

Adjunto comparamos la parentidad-paraleta con la co-parentidad:


Parentalidad-Paralela

No pueden interactuar ni resolver problemas juntos.

Co-Parentalidad

Pueden resolver los problemas juntos.


Parentalidad-Paralela

Toman decisiones de manera separada y no se comunican.

Co-Parentalidad

Ambos toman decisiones basadas en el bienestar de los hijos.


Parentalidad-Paralela

Se agendan días y horas específicos para las actividades de los hijos, y ambos comparten la información (aunque sea por escrito).

Co-Parentalidad

Ambos asisten a las actividades de los hijos al mismo tiempo: citas médicas, actos cívicos, y reuniones escolares.


Parentalidad-Paralela

Causa efectos negativos emocionales y psicológicos en los niños, incluso a largo plazo.

Co-Parentalidad

Los hijos reciben lo mejor de ambos incluso después de la separación.


Parentalidad-Paralela

Culpan al otro y hablan mal de ellos
en frente de los hijos. Evaden su responsabilidad en la toma de decisiones.

Co-Parentalidad

No hablan mal del otro en presencia de los hijos y asumen sus responsabilidad en las decisiones que se tomen en relación a ellos.


Es fundamental que estés pendiente del bienestar emocional de tus hijos consultando con los profesores, doctores, terapeutas, amistades o familiares que estén en constante contacto con ellos y que puedan mantenerte al tanto.

Con el pasar del tiempo, tu situación puede cambiar, y solo vos podés saber qué es lo que funcionaría mejor para tu familia. Y cuando vayás a tomar una decisión POR FAVOR pensá en el bienestar de tus hijos y su seguridad física y emocional.